sábado, 31 de julio de 2010

Prohíben las corridas de toros en Cataluña.

Imagen: Ahora sí aboliremos las corridas de toros.

El Parlamento de Cataluña aprobó una ley que prohibirá la práctica de la tauromaquia a partir del primer día del año 2012. Votada a favor por 85 municipios, esta ley fue un logro del gran esfuerzo de la Iniciativa Legislativa Popular por la abolición de la tauromaquia (Prou), después de años de trabajo y apoyo por sus simpatizantes, colectaron un total de 180,169 firmas contra unas 50,000 que son el mínimo que requiere la ley de esa región para tomar en cuenta el petitorio.


Como siempre, hay quienes están a favor y felices por la abolición, pero también hay quienes están en contra y replican por conservar su arte taurino. 

Para mí es más buena noticia, un logro enorme para la historia del maltrato animal y que está teniendo repercusiones, por ejemplo, en Madrid también está ocurriendo una movilización por hacer una petición de una ley similar y que se aplique en ese territorio, y leyendo una nota del sitio del Prou donde menciona que legisladores de diferentes partidos políticos mexicanos enviaron una carta para pedir se votara a favor esta ley, signo de que en Latinoamérica también hay preocupación por esta práctica, sobre todo en México que es como el segundo país donde están tan presentes las corridas de toros. 

No se me hace justo que por ser nosotros superiores a los demás animales, toros en este caso, tengamos que someterlos a un sufrimiento que lleva hasta la muerte en un duelo que no es nada parejo como dirían algunos. Al enfrentarse cara a cara torero y toro ya hubo un previo castigo para debilitar al animal de cuernos, y si éste llegara a tener una entrada a su favor, no se le hes permitido llegar a la victoria y matar a su oponente el torero, caso contrario si es el torero quien mete la espada para obtener su triunfo ante el toro.



He de confesar que yo asistía de chico a las corridas de toros, me llevaban mi tío y mi papá, y disfrutaba mucho el hecho de asistir y ver la euforia de la gente, al principio no tenía mucho noción de lo que veía y sólo me sentaba ahí a disfrutar, después lo empecé a entender y no quise asistir más. Sí puede llegar a ser bello el admirar un espectáculo de un representante que lo ejecuta como un arte, pero sería igual como cualquier otro deportista o artista que hace bien lo suyo, lo grave y por lo que es detestado, es el tener que matar a otro ser lleno de vida tal como nosotros.



Me gusta mucho todo el arte que se forma alrededor de la tauromaquia, pinturas, esculturas, el traje de luces del torero, las plazas, las flores, pero lo que repudio es la sangre y el sufrimiento.



Cada quien tiene su opinión, pero las cosas están cambiando a favor de lo que la mayoría asume como lo mejor.